Emily Stewart se incorporó a Casa Esperanza, Inc. como Directora de Desarrollo en 2004. Después fue Directora Adjunta durante seis años, antes de asumir el cargo de Directora Ejecutiva en 2011. Antes de incorporarse a Casa, su carrera incluyó experiencia como productora de radio y televisión, seguida de una transición al sector no lucrativo, donde pasó varios años asesorando a empresas incipientes, instituciones académicas, centros de salud comunitarios y organismos gubernamentales en materia de comunicación estratégica, gestión, desarrollo de programas, recaudación de fondos, eventos especiales y desarrollo inmobiliario.
Emily es responsable de la supervisión general de todos los programas y servicios de Casa Esperanza, además de supervisar al personal administrativo, los recursos humanos, las finanzas, las comunicaciones, el desarrollo y las operaciones. Durante su mandato en Casa Esperanza, ha conseguido y puesto en marcha más de quince subvenciones competitivas de la Administración de Servicios de Salud Mental por Abuso de Sustancias. Ha encabezado la puesta en práctica, adaptación y evaluación de más de 20 intervenciones culturalmente relevantes basadas en pruebas, incluido nuestro modelo de atención integrada CasaCare, y ha aumentado las tasas de finalización del tratamiento en más de un 30%. Ha supervisado importantes iniciativas estratégicas, como la implantación de Evol, un sistema de historias clínicas electrónicas para modernizar el seguimiento de la información de los pacientes, y el desarrollo de programas para ampliar significativamente la capacidad de Casa para prestar servicios a los pacientes, como la Clínica Ambulatoria Familias Unidas, Conexiones CSS (Servicios Clínicos de Estabilización) y Viviendas de Apoyo Nueva Esperanza, cada uno de los cuales aborda necesidades únicas de la comunidad.
Emily es licenciada en Comunicación por la Universidad de Massachusetts y tiene más de 20 años de experiencia trabajando con poblaciones que se enfrentan a barreras para recibir atención sanitaria, como comunidades raciales y lingüísticas marginadas, mujeres y niñas en situación de riesgo, jóvenes desfavorecidos, personas y familias sin hogar y personas que padecen trastornos mentales y por consumo de sustancias. También forma parte de la Junta Directiva de la Asociación para la Atención de la Salud Mental, donde copreside el Comité de Colaboración con Poblaciones Desatendidas, así como el Comité Asesor de Proveedores.